El proceso de formación que normalmente tiene una persona para sacar una carrera o una profesión, rara vez, se complementa con estrategias  que se oriente a cómo vender de la mejor forma posible lo que uno sabe.

Normalmente, los contenidos entregados por las instituciones superiores están diseñados para las empresas. En este sentido, todo lo que se circunscribe a ventas, publicidad o estrategias de posicionamiento en el mercado,  tiene como objetivo un producto, “algo” que es externo a mi persona.

Por lo tanto, la retroalimentación de la forma de cómo observamos, utilizamos y aprovechamos, el conocimiento, los saberes y en definitiva, nuestras competencias,  tiene que ser reestructurado y transformado en lo que soy.

Lo que soy, se centra y fundamenta en todas las cosas que puedo ver, tocas, degustar,...